Solo en 2017 el Ministerio de Educación atendió más de 25.000 el teléfono de atención al acoso en el ámbito escolar. Una cifra estremecedora, que oculta una triste realidad académica y que, con el concurso de padres, educadores y alumnos puede tener solución si el conjunto de la sociedad rema en la misma dirección contra el bullying.
Videojuego para la prevención del bullying en edades tempranas
Aparcado el mantra de “son cosas de niños”, la tarea de combatir y erradicar el bullying está en todos los sectores, conscientes de que esta problemática influye en el desarrollo del niño, tanto a nivel académico como a nivel personal. Esta es la razón por la que, en el mundo de los videojuegos, han nacido iniciativas como Monité, enfocado a la prevención del bullying en edades tempranas. Una iniciativa que impulsa Nesplora, una empresa pionera en evaluación neuropsicológica en entornos de realidad virtual. Creada en 2009, Nesplora nace con la idea de construir con tecnología nuevas formas de tratamiento y evaluación de neurociencias en general y de la conducta y cognición en particular.
Hablamos con Gema Climent, fundadora de Nesplora, para que nos cuente más en profundidad cómo surge Monité y hacia dónde está enfocada. “Monité se creó en 2015 gracias a un Proyecto Avanza del Ministerio de Industria, orientado a prevenir y trabajar en edades tempranas el bullying”, asegura su creadora.
“Nos gusta revolucionar los tratamientos de conducta actuales con tecnología y un videojuego era la mejor manera de trabajar con niños de 6 a 11 años”
Gema Climent, fundadora de Nesplora
Con más de 10 años de experiencia en neuropsicología clínica, Gema Climent tiene además un postgrado en Neuropsicología Infantil. Conocimientos que ha puesto en práctica en residencias y clínicas como especialista en evaluación de patologías neurológicas infantiles y de adultos. Un background, orientado a la búsqueda del beneficio de la salud de las personas en el campo de las neurociencias. Razón por la que Nesplora decidió embarcarse en Monité. “Nos gusta revolucionar los tratamientos de conducta actuales con tecnología y un videojuego era la mejor manera de trabajar con niños de 6 a 11 años”, comenta Gema.
“Prevenir y trabajar sobre el bullying en edades tempranas ha demostrado ser efectivo. Además, el hecho de ser un aprendizaje implícito evita rechazos por parte de los niños”, afirma. “Se trabaja con metáforas para que el aprendizaje sea más duradero y se comprendan mejor los mensajes”, nos aclara.
¿Cómo ayuda Monité en la lucha contra el bullying?
Enmarcado dentro de lo que podríamos considerar un Serious Game, Monité es como un cuento del que extraer metáforas, sin que los niños sientan que es una tarea aburrida. “Al jugar y conocer el personaje es más fácil introducir los aprendizajes necesarios. En el cuento todo se organiza para trabajar los mensajes de las guías”, indica Gema. El objetivo, asegura la fundadora de Nesplora, es “que los niños interioricen que el acoso es un elemento distorsionador, que no es bueno y que la vida es más interesante en colaboración”.
“Diversificado en cuatro ‘planetas’ distintos, el universo Monité se sucede en cuatro escenarios diferenciados: Raining planet, Electroplanet, Indiferent planet y Clown planet, cuyas narrativas son diferentes en cada situación, orientadas a un punto de vista: acosado/a, ciber bullying, espectadores y agresor/a”, aclara Gema Climent. Para crear estas historias además han contado con Daniel Nesquens, un autor de literatura infantil, responsable de dotar de ‘alma’ a Monité. “La importancia de una buena historia con una narrativa eficaz y maravillosa como la de Daniel, y un lenguaje divertido es lo que necesita toda plataforma: ya sea un videojuego, una película o un cuento”, remarca Gema.
“La gamificación nos permite jugar con refuerzos y motivaciones donde con otros métodos es difícil llegar”
Gema Climent, fundadora de Nesplora
Una ventaja de la que se aprovechan la gamificación y las nuevas tecnologías, que en Monité se presentan de manera conjunta con juego y cuento. “La gamificación nos permite jugar con refuerzos y motivaciones donde con otros métodos es difícil llegar”, puntualiza Gema. Un dato que nos ayuda a comprender también la perdurabilidad del aprendizaje, que trasciende al desvanecimiento del juego porque hay una metáfora detrás que ha enseñado lo adecuado.
Orientado a una franja de edad que oscila entre los 6 y 11 años, Monité se convierte en un videojuego de prevención, razón por la que se utiliza en edades tan tempranas. “A partir de los 12 años creemos que se necesitan otros métodos y otras narrativas”, sustenta Gema. “Pero es muy importante prevenir y enseñar empatía desde antes, para que no se confunda lo que es hacer una gracia con hacerla a costa de los demás”, manifiesta la fundadora de Nesplora y responsable de Monité, que se encuentra a disposición de terapeutas, padres, centros educativos y profesores, demostrando su éxito a lo largo de estos años y combatiendo, de una forma lúdica, un problema como el bullying.